Un video presentado en la Corte bastó para que la mujer contara la verdad.
Cheryl Moss, madre de cuatro niños, mintió porque estaba avergonzada de haber tenido relaciones sexuales con un joven soldado.
La mujer, de 26 años y quien aseguró que el soldado la había violado en un callejón a la vuelta del bar donde estaba tomando, fue condenada a 15 meses de prisión por mentirles a las autoridades, según lo informó el diario 'Daily Mail' en su versión digital.
Después de cuatro meses y 5.500 libras esterlinas que se gastaron en la investigación, las autoridades presentaron un video que demostraban que no había ocurrido tal violación.
Según contó el diario, el video, tomado de las cámaras de seguridad de un edificio, muestra a Moss y al soldado saliendo de una discoteca en Dorset al suroeste de Inglaterra. En él, se les ve a ambos teniendo relaciones sexuales por más de una hora y sin algún tipo de forcejeo. Incluso, antes de despedirse, Moss le dio su número de teléfono.
Luego del fugaz amorío, tomó un taxi y se fue hasta su casa, donde una amiga la encontró llorando. Ella asumió que había sido asaltada y llamó a la Policía. Cuando llegaron, Moss les dijo que había sido violada.
Martín Devine, el joven soldado de 19 años, fue entrevistado por la Policía pero no fue arrestado porque, según contó el diario, las declaraciones de Moss se tornaban confusas.
En algunas declaraciones en la Corte, citadas por el diario, Moss aseguró que el soldado la llevó hasta el callejón y la violó cuando ella en varias ocasiones le dijo que se detuviera.
Dijo además que el soldado la "hizo sentir incomoda y sucia".
Después de ver el video, Moss aceptó que mintió porque se sentía avergonzada de haber tenido relaciones sexuales en un callejón con un hombre menor.

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