frafraa
Bovino maduro
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Algunos lo consideran un tsunami imparable. Son activistas y se ofenderían si los adscribieran a cualquier corriente política. Pueden inutilizar cualquier red o sistema informático si se lo proponen, como lo demostraron en enero pasado, cuando colapsaron las webs oficiales de Túnez, tras la inmolación de Muhamed Buazizi, el universitario desempleado de 26 años cuya muerte lo convirtió en icono de larevolución del jazmín.
Anonymous no es una persona en concreto, sino que puede ser todo el mundo, todas las personas que luchan por la transparencia, los derechos humanos y la libertad de expresión.
Rechazan cualquier liderazgo y en sus apariciones públicas utilizan una máscara como la del anarquista revolucionario de V de Vendetta, la novela gráfica de Alan Moore, escrita en 1988.
En el capítulo 9 de este clásico del mundo del cómic se lee: "¿Querías matarme? Bajo esta capa no hay carne ni huesos que matar. Sólo hay una idea. Las ideas son a prueba de balas."
Con esa inspiración, se hacen llamar Anonymous, y están en todo el mundo.
El movimiento tiene más de diez años, pero comenzaron a cobrar notoriedad en diciembre pasado, tras los ataques cibernéticos a Visa y Mastercard, las empresas que dieron la espalda a Wikileaks.
Su principal punto de unión no es una Web o un foro, sino una red de chat conocida como IRC. Ahí discuten y planean estrategias que luego son secundadas y distribuidas en la red por blogs y webs anonymous, hasta llegar a los Twitter y Facebook de anonymous individuales.
Cualquiera puede entrar y preservar su anonimato, y en las escasas entrevistas que dan, siempre con la máscara puesta, se rebelan a todo régimen totalitario y cualquier intento por controlar su vida y sus pensamientos.
Se refieren a Anonymous como la conciencia colectiva que, gracias al mundo digital, puede expandirse sin fronteras. La mayor parte de los anonymous no son hackers en el sentido clásico de la palabra, sino usuarios de Internet con una motivación para el activismo digital.
Tras la salida de Carmen Aristegui de MVS, Anonymous lanzó por primera ocasión un ataque en contra de una página en México y, según la información difundida, la “Operación Tequila” (#OpTequila) se convirtió en tema del momento en Twitter, con decenas de miles de participantes.
En misiva electrónica aseguran que fue una protesta sin precedente que tuvo “un rotundo éxito” gracias a la inmensa participación voluntaria de ciudadanos que están “hartos con la situación actual del país”.
Anonymous se pronunció por defender los pocos espacios democráticos que existen en los medios de comunicación y, si es posible, expandirlos.
“Es nuestra única oportunidad para corregir el rumbo de forma pacífica, ya que otros espacios públicos para manifestarnos se ven cerrados. La protesta es un derecho que tenemos, y que ejercemos con la solidaridad de otros Anonymous en el mundo”.
Un Anonymous español, entrevistado por El País se refiere al movimiento como “el último bastión de la libertad en Internet, la gran esperanza de todos los ciudadanos del mundo en su lucha contra la opresión”.
“Habéis cabreado al enjambre”, advirtió.
Tomado de la Revista Filos.mx
Anonymous no es una persona en concreto, sino que puede ser todo el mundo, todas las personas que luchan por la transparencia, los derechos humanos y la libertad de expresión.
Rechazan cualquier liderazgo y en sus apariciones públicas utilizan una máscara como la del anarquista revolucionario de V de Vendetta, la novela gráfica de Alan Moore, escrita en 1988.
En el capítulo 9 de este clásico del mundo del cómic se lee: "¿Querías matarme? Bajo esta capa no hay carne ni huesos que matar. Sólo hay una idea. Las ideas son a prueba de balas."
Con esa inspiración, se hacen llamar Anonymous, y están en todo el mundo.
El movimiento tiene más de diez años, pero comenzaron a cobrar notoriedad en diciembre pasado, tras los ataques cibernéticos a Visa y Mastercard, las empresas que dieron la espalda a Wikileaks.
Su principal punto de unión no es una Web o un foro, sino una red de chat conocida como IRC. Ahí discuten y planean estrategias que luego son secundadas y distribuidas en la red por blogs y webs anonymous, hasta llegar a los Twitter y Facebook de anonymous individuales.
Cualquiera puede entrar y preservar su anonimato, y en las escasas entrevistas que dan, siempre con la máscara puesta, se rebelan a todo régimen totalitario y cualquier intento por controlar su vida y sus pensamientos.
Se refieren a Anonymous como la conciencia colectiva que, gracias al mundo digital, puede expandirse sin fronteras. La mayor parte de los anonymous no son hackers en el sentido clásico de la palabra, sino usuarios de Internet con una motivación para el activismo digital.
Tras la salida de Carmen Aristegui de MVS, Anonymous lanzó por primera ocasión un ataque en contra de una página en México y, según la información difundida, la “Operación Tequila” (#OpTequila) se convirtió en tema del momento en Twitter, con decenas de miles de participantes.
En misiva electrónica aseguran que fue una protesta sin precedente que tuvo “un rotundo éxito” gracias a la inmensa participación voluntaria de ciudadanos que están “hartos con la situación actual del país”.
Anonymous se pronunció por defender los pocos espacios democráticos que existen en los medios de comunicación y, si es posible, expandirlos.
“Es nuestra única oportunidad para corregir el rumbo de forma pacífica, ya que otros espacios públicos para manifestarnos se ven cerrados. La protesta es un derecho que tenemos, y que ejercemos con la solidaridad de otros Anonymous en el mundo”.
Un Anonymous español, entrevistado por El País se refiere al movimiento como “el último bastión de la libertad en Internet, la gran esperanza de todos los ciudadanos del mundo en su lucha contra la opresión”.
“Habéis cabreado al enjambre”, advirtió.
Tomado de la Revista Filos.mx
